JHON.

¿Cómo estás? El día de hoy, durante mi tiempo libre te recordé... gran parte de los días que estuve dentro del colegio, estabas tú ahí molestando, realizando bromas leves y otras muy pesadas. Quizás algo de eso hizo de mi carácter débil… amigo te confieso que me gustaría volver, para evitar esas agresiones, a las cuales fui víctima. Ahora entiendo que mucho de lo que paso estuvo mal, no te culpo fuimos niños durante esa época y crecimos ante un entorno poco favorecedor.

Hoy en día quizás las cosas son peores, más denigrantes e incluso esas burlas, golpes  a los que me acostumbre hoy son normales. No lo sé. Recordar esas situaciones me llenan de nostalgia y también de risa. Sabes quiero tenerlos como un aprendizaje y recordarlos para evitar que otros jóvenes, niños caigan en situaciones similares.

Han pasado cuatro años, cada uno ha tomado rumbos diferentes, desconozco la realidad de cada uno, los sueños o las metas que tienen. Pero los recuerdo con cariño.

Tus ojos muchas veces me decían que había alguien dentro de ti que clamaba entendimiento, cariño, consuelo. Supuse lo solo que podías estar, pero no dije nada. La risa de tu rostro, tus palabras vociferantes y la búsqueda de atención eran señales para pedir ayuda, quizás. Desconozco del como estarás, si esta situación aún está latente en tu vida.

¿Sabes? Ese compañero alegre, de voz fuerte e influencia para otros hoy tiene valor para mí, porque me has enseñado a ver las pequeñas acciones negativas de otra forma. Quizás sin esos sucesos desconocería todo lo que ahora sé.

Amigo estamos en tiempos complejos, cuida tu vida, recuerda que en tus manos hay una misión y recuerda que tienes en mí una amiga.

Emiliana.




A veces las raíces de un mal positivo inician dentro de un aula. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

ABU

Bloqueos

EN BLANCO